La situación actual de nuestro entorno natural es cada vez más desesperada, los seres humanos hemos puesto en peligro la vida de nuestro planeta entero y quizá del propio universo, esto se debe a una falta de respeto por las leyes de la naturaleza. El enfoque Montessori presta una especial importancia a la interdependencia del hombre con la naturaleza y hoy más que nunca se rescata la idea de establecer una relación con esta.
Cuando existe tal desconexión, no es difícil entender que crecer de manera tan ajena a la vida natural nos lleve a convertirnos en seres que contaminamos, saqueamos y destruimos el medio natural, sin siquiera tener conciencia de lo que hacemos. Áreas como la botánica, la zoología y el estudio de la tierra forman una parte integral del currículo Montessori, nuestros pequeños de 6 años pueden llegar a conocer más sobre la clasificación de las plantas y el cuidado de los seres vivos que un adulto promedio. Esta apertura al mundo natural permite al niño y a la niña convertirse en un adulto interesado y ecológicamente responsable.
El huerto infantil en el método Montessori
El método Montessori integra la naturaleza en el ambiente y lo que es más importante aún lleva al niño a vivir dentro de esta, parte de un pensamiento cósmico en la que cada ser está interrelacionado. La Dra. Montessori decía: “Realmente, el hecho más importante es la liberación del niño… de los vínculos que lo aíslan en la vida artificial creada por el hecho de vivir en las ciudades”.
Partiendo de este aspecto tan relevante para nuestra situación actual como seres que habitamos este mundo, hoy aportaremos algunas ideas para la creación de un huerto en el ambiente Montessori.
Un huerto permite que los niños se acerquen a la naturaleza construyendo además un espacio de aprendizaje sobre la agricultura y nutrición, generando conciencia del origen de los productos de la tierra.
Beneficios de crear un huerto para los niños
- Autonomía, motricidad y observación.
- Trabajo en equipo.
- Responsabilidad.
- Desarrollo de habilidades motrices.
- Sostenibilidad.
- Aprendizaje sobre los alimentos y el cuidado de las plantas.
¿Cómo hacer un huerto infantil?
- Buscar un espacio de interior/exterior, que tenga al menos 5 horas de luz al día. Limpiar la tierra, macetas o cajas de cultivo: se buscará que la tierra sea apta para cultivar.
- Integrar sustratos que permitan adecuadas condiciones de oxigenación, humedad, nutrición y temperatura.
- Hacer surcos e introducir las semillas, es importante elegir aquellas que sean aptas para el lugar y la época del año y que al plantarlas se dejen espacios entre estas, se puede seguir la siguiente referencia de siembra entre semillas: Frutos 3 espacios, hojas 6 espacios, aromáticas 5 espacios.
- Riego, según las necesidades de cada cultivo.
- Revisión de las fases lunares y su influencia en la siembra y abono de las plantas.
- Establecer un medio de protección para el cultivo, esto evitará que se dañe por cualquier otro agente externo.
Para aquellos que desean profundizar en esta experiencia y seguir nutriendo el interés de los niños por la naturaleza, hemos recopilado una lista de lecturas recomendadas. Estos libros no solo complementarán el acercamiento al huerto, sino que también ofrecerán ideas, consejos y actividades adicionales para disfrutar en familia mientras exploran el fascinante mundo de la jardinería y la naturaleza.
- “De semilla a Planta” de editorial National Geographic Kids
- “Huerto fácil con niños” de editorial Larousse
- “Jardinería para principiantes” de editorial Usborne
- “Crea tu huerto” de editorial Susaeta
- “Con calma” de editorial Flamboyant
- “Ahí afuera. Guía para descubrir la naturaleza” de editorial Geoplaneta kids
Ana Lucía Hermida
Giovanni Añez dice
Excelente trabajo. Gracias