El desarrollo del lenguaje en la pedagogía Montessori
El lenguaje es uno de los aspectos que distingue a los seres humanos y que cumple una doble función, permite la expresión individual y la oportunidad de relacionarnos con otros, de ahí la importancia de favorecer las habilidades de comunicación oral y escrita desde los primeros años.
En la Casa de los niños, la propuesta de la pedagogía Montessori se enfoca en favorecer el desarrollo del lenguaje oral y en iniciar los procesos de escritura y lectura.
Ante el planteamiento de que los niños debían aprender, la Dra. Montessori decidió no enseñar las materias directamente, sino que hizo que los niños tomaran conciencia de ciertos detalles, les proporcionó condiciones y ayudas educativas que les permitieron aprender por sí mismos sin obstaculizar el proceso de su desarrollo natural.
La Dra. concluyó que, en el ámbito del intelecto, el desarrollo natural del niño es un proceso espontáneo e incesante. El medio para llegar al aprendizaje de las habilidades de lectoescritura es inspirarse en intereses intensos, siguiendo las etapas por las que atraviesa y utilizando materiales atractivos.
Una de las mayores contribuciones de la Dra. Montessori fue analizar en sus elementos los temas que se esperaba que los niños aprendieran y distribuirlos de manera que cada uno encaje en el intenso interés que prevalecía en cierto período específico de la vida.
Comparativa entre niños y adultos: Aprendizaje de idiomas desde la infancia
El lenguaje ofrece el mejor ejemplo para mostrar la diferencia en el proceso de aprendizaje de niños pequeños y adultos. Supongamos que ambos parten de la más absoluta ignorancia para aprender un idioma extranjero, porque no creo que nadie discuta el hecho de que para un recién nacido cualquier lengua es una lengua extranjera. Traslademos este ejemplo al campo de lo físico, esto nos puede ayudar a aclarar las cosas, supongamos que un niño recién nacido y un adulto fueran a correr una carrera: la lógica de todos concluiría que el adulto llegaría primero a la meta y que la competencia sería injusta porque el recién nacido tiene una desventaja demasiado grande en relación a este. Regresando a nuestro ejemplo de la lengua extranjera, nuevamente pensaríamos en las grandes ventajas que podría tener el adulto, sin embargo, si lo pensamos detenidamente veríamos cómo el niño entre los dos y los tres años de edad puede hablar con coherencia y gramática la lengua en la que se haya inmerso, y poco tiempo después hablará esta misma de forma tan eficiente que habrá alcanzado la maestría y perfección de los adultos que hablan el mismo idioma.
Al pensar en los medios utilizados y los caminos seguidos por ambos para alcanzar el objetivo común de aprender una lengua, encontramos que los adultos tienen una mente completamente desarrollada y mucho mejor equipada que las del recién nacido, sin embargo, al abordar una lengua extranjera, los adultos aprenden mediante el esfuerzo, centrando por separado sus esfuerzos conscientes en absorber elementos tales como pronunciación, gramática, construcción, verbos, conjugación, género, sustantivos, adjetivos, etc. El niño por su parte dice la Dra. “lo hacen de forma natural. Parecen absorber”. (Montessori “La mente absorbente”).
Retomando este análisis, incluso los psicólogos o pedagogos más lejanos de la pedagogía Montessori estarían de acuerdo con la Dra. Montessori en que ciertamente entre el nacimiento y los tres años no hay ningún esfuerzo voluntario para estudiar el lenguaje en todas sus complejidades. Si el aprendizaje infantil no es voluntario, se debe concluir que el proceso no se encuentra en el campo del esfuerzo consciente, el esfuerzo del niño está oculto en un esfuerzo subconsciente y no es dirigido por un maestro, sino por las fuerzas impulsoras que guían el propio desarrollo humano, los resultados que el niño obtiene, nos llevan a la conclusión de que en su esfuerzo subconsciente debe haber habido una exploración muy meticulosa y detallada que descubrió y sin que se diera cuenta, le permitió absorber incluso las más mínimas inflexiones de los sonidos.
Esta necesidad de explorar es un ejemplo de esos “intereses intensos” que se centran en diferentes elementos en diferentes períodos de la vida del niño en desarrollo. A través de la enseñanza, la Dra. Montessori dio ayudas al niño, en ocasiones “pistas” y más a menudo “claves” educativas que permitieron al niño alcanzar abstracciones en diversos campos sin que se le enseñara directamente, o hacer descubrimientos, o traer al nivel de la conciencia elementos que ya poseía en la oscuridad de su subconsciente.
Materiales Montessori: Claves innovadoras para la escritura infantil
En el ámbito del lenguaje la Dra. Montessori dio muchas “Claves”. Aquellas relacionadas con la escritura, se forjan en un período de la vida en el que el impulso de explorar ya no se limita al subconsciente, sino que también comienza a involucrar a la conciencia, ella les dio a los niños la clave de que las palabras se componen de una combinación de sonidos separados.
El objetivo de la Dra. Montessori no era enseñar. De hecho, fue una sorpresa para ella el constatar cómo el niño al adquirir un conjunto de habilidades aparentemente inconexas integradas en diferentes momentos, de pronto le servían para escribir.
Así pues, los materiales se centraron en la necesidad de comunicación de los niños y se presentaron en una forma dinámica, ya que las habilidades de expresión oral y escrita también son una parte fundamental del desarrollo global del niño y tienen implicaciones en los aspectos emocionales, motores, cognitivos y sociales.
Descubre nuestros programas de lenguaje Montessori
Después de reflexionar sobre la importancia de la lectoescritura, te extendemos una invitación a explorar nuestros cursos especializados en lenguaje Montessori. Diseñados para enriquecer las habilidades lingüísticas en diferentes etapas del crecimiento.
1. Programas de lectoescritura en infantil (3-6 años):
Curso de especialización en Lenguaje Montessori: 3-6 años
Sumérgete en la magia de guiar a los más pequeños en sus primeros pasos hacia el lenguaje. Nuestros programas ofrecen herramientas prácticas basadas en la filosofía Montessori, estimulando el desarrollo lingüístico desde la cuna.
2. Programas de lectoescritura en primaria (6-12 años):
Curso de especialización en Lenguaje Montessori: 6-12 años
Descubre estrategias efectivas para fomentar un dominio profundo del lenguaje en las etapas más avanzadas del crecimiento. Nuestros programas abordan específicamente las necesidades de esta etapa, utilizando métodos Montessori probados.
Deja una respuesta