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āCualquier niƱo que sea autosuficiente, que pueda atar sus zapatos; vestirse y desvestirse, refleja en su alegrĆa y sentido del logro, la imagen de la dignidad humana que se deriva de un sentido de independenciaā Dra. MarĆa Montessori
A finales de 1906, la Dra. Montessori tuvo la oportunidad de estar al frente de un grupo de niƱos (de entre tres y seis aƱos) del barrio de San Lorenzo, en Roma, quienes no tenĆan recursos para acudir a la escuela. Esta experiencia le sirviĆ³ para ir descubriendo, a travĆ©s de la observaciĆ³n, los principios pedagĆ³gicos que orientaron su tarea educativa y que, al dĆa de hoy, siguen funcionando con niƱos pertenecientes a diferentes entornos culturales y econĆ³micos, mĆ”s de un siglo despuĆ©s.Ā
Dentro de estos principios encontramos uno de vital importancia:
El Sentido de la dignidad personal de los niƱos
Definamos primero, ĀæQuĆ© es la dignidad de la persona?Ā
Es el derecho que tiene cada ser humano, de ser respetado y valorado como ser individual y social, con sus caracterĆsticas y condiciones particulares, por el solo hecho de ser persona. Respetar la dignidad implica aceptar y reconocer la autonomĆa del otro en su manera de actuar y pensar, sin atentar contra su integridad fĆsica o mental, y brindarle siempre un trato digno, libre de humillaciones.Ā
Es comĆŗn que como adultos pensemos que un niƱo/niƱa es un ser totalmente dependiente de nosotros, que necesita ser ādominado por alguien superiorā. En la opiniĆ³n de la mayorĆa de la gente, los niƱos deben ser obedientes y aprender del adulto āexpertoā, siendo que, por el contrario, es necesario considerar su punto de vista y se debe comprender que son extremadamente sensibles a todas las formas en las que nos comunicamos con ellos.
La Dra. Montessori llegĆ³ a esta conclusiĆ³n cuando un dĆa, de modo casual y casi a manera de broma, decidiĆ³ dar una lecciĆ³n de cĆ³mo limpiarse la nariz, llevĆ”ndolo a cabo de una forma discreta con la finalidad de hacer el menor ruido y disimulando el uso del paƱuelo, de manera que esta acciĆ³n fuera lo mĆ”s correcta posible. Este acto causĆ³ revuelo entre todos los estudiantes, ellos aplaudieron al unĆsono apenas terminĆ³ la demostraciĆ³n y le agradecieron incansablemente.Ā
Ella se dio cuenta de que nadie se habĆa tomado el tiempo para enseƱarles pacientemente esta prĆ”ctica, la cual, fue evidente que les hizo sentir que alguien les respetaba y les permitĆa formar parte de la sociedad. ComprendiĆ³ la importancia del respeto a su persona e individualidad, y que esto no se debe minimizar por el hecho de ser niƱos, sino todo lo contrario.
Para los niƱos, el momento en el que un adulto se acerca casi sin avisar para limpiar su nariz es un momento desagradable y humillante, asĆ que enseƱarles a hacerlo por ellos mismos les devuelve esa dignidad y les hace sentir seguros.
Esta experiencia le demostrĆ³ a Montessori que los niƱos tienen un sentimiento profundo de la dignidad personal. Y que cuando el adulto les toma en cuenta, les muestra la manera de hacer las cosas y les permite actuar de manera autĆ³noma, ellos se adaptan y se desenvuelven de forma autĆ©ntica, espontĆ”nea y sincera.Ā
Este tipo de acciones se pudieron observar en San Lorenzo, cuando los niƱos recibĆan visitas en el colegio sin previo aviso:
Ā āLos niƱos se comportaban con dignidad y amor propio, sabĆan dirigir su trabajo y recibir a la gente con gratitud y entusiasmo cordialāĀ Dra. MarĆa Montessori
AsĆ pues, podemos concluir que es necesario cambiar nuestra forma de pensar con respecto a los niƱos, ya que respetarlos y reconocer su dignidad, es condiciĆ³n primordial para que desarrollen sus potencialidades de forma Ćntegra; favoreciendo la motivaciĆ³n, una buena actitud y la disposiciĆ³n para socializar. Podremos observar efectos maravillosos en ellos mismos y en el entorno que les rodea, ya que, al satisfacer la necesidad de pertenecer, los niƱos son capaces de desarrollar grandes cualidades como: respeto, responsabilidad, amor por el orden y el silencio.
Rosaura Rodriguez Infante
Departamento PedagĆ³gico- Casa de niƱos
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Muchas gracias por su explicaciĆ³n entendido š
Muchas gracias a vos por tu comentario Lucy š