Ambiente preparado en casa para niños de 6 a 12 años

La importancia del ambiente preparado

Uno de los aspectos fundamentales de la pedagogía Montessori es el ambiente preparado.

A partir de la observación científica, María Montessori concluyó que el ambiente que rodea al niño durante sus primeros años es determinante para alcanzar un desarrollo integral y pleno.

Contemplar las necesidades del niño de acuerdo a la etapa de desarrollo es la pauta para saber cómo construir este espacio. En los colegios que trabajan bajo esta pedagogía se organiza todo lo necesario para brindar a los chicos un espacio de desarrollo adecuado.

Aportaciones al desarrollo del niño

El ambiente preparado brinda, por supuesto, actividades que aportan a los niños y niñas oportunidades de crecimiento intelectual, lo cual es de suma importancia. Sin embargo, un ambiente preparado va más allá.

Debemos considerar que existe un ambiente psicológico que puede contemplarse en los materiales y la disposición de éstos en el espacio, pero que incide, además, en otros aspectos fundamentales del desarrollo que sustentan esta educación para la vida, como son:

• Libertad para tomar decisiones, asumiendo las consecuencias de las mismas
• Independencia
• Autocontrol
• Socialización basada en el respeto
• Capacidad de espera
• Colaboración
• Responsabilidad por el bien común
• Libre expresión
• Cuidado del entorno

¿Cómo crear un ambiente preparado en casa?

Conocer la filosofía Montessori y vivirla diariamente con los hijos en el hogar es posible. Esto no significa, necesariamente, que los padres deben formarse como guías y montar un ambiente en casa con todos los materiales. Sea el caso o no, de que los chicos asistan a un colegio con esta pedagogía, podemos adoptar pautas de vida congruentes con esta filosofía:

• Respetar el ritmo del niño. Aunque los chicos de 6 años 12 pueden ser bastante independientes en el plano físico, es importante brindarles el tiempo que requieren para realizar cualquier actividad. 
• Permitirle tomar decisiones. Podemos comenzar desde aspectos muy sencillos como elegir algunas de las comidas, incluso pueden, ellos mismos, elaborar una propuesta de menú. Decidir cómo quieren organizar su dormitorio, o el atuendo para cada día. Todo esto dentro del marco de las reglas que cada familia maneja.
• Colaborar con las labores de casa es un aspecto muy importante. Esto implica no solamente el cuidado de su espacio personal sino la ayuda en otras labores necesarias para el beneficio común. 
• Ser responsable de la limpieza y orden de su espacio personal. Aún en los casos en los que se cuenta con ayuda extra en las labores del hogar, los niños y las niñas necesitan cuidar del espacio que se les brinda como suyo.
• Generar espacios para charlas. Los niños de estas edades se encuentran en un periodo de desarrollo social, intelectual y moral. Existe una gran cantidad de temas que les interesan y es maravilloso tener un espacio de reflexión en casa. Asimismo, permitirles la libre expresión dentro de un marco de respeto fomenta la independencia de pensamiento, fundamental en esta etapa.
• Límites claros. En cualquier etapa de desarrollo los límites brindan al niño seguridad y contención. Los chicos cuestionarán todo el tiempo las reglas, por lo que el dialogo abierto es necesario, al igual que ser firmes cuando el límite no puede ser modificado porque afecta la integridad del niño.
• Tener en casa libros que permitan la exploración de diversos temas. Por supuesto, buscar información en la red es una alternativa, pero debemos que buscar que la primera opción sea un libro. También es necesario fomentar actividades culturales. 
• Alentar el desarrollo social. Para crear vínculos con sus pares es fundamental que la convivencia en casa sea respetuosa y armónica. 

Ideas para crear un ambiente preparado durante la cuarentena

Sin duda estamos viviendo una situación compleja y la educación no está exenta de dicha dificultad, hay muchos factores involucrados. Pero, sin duda, hay algunas cosas que podemos hacer:

• Mantener una rutina. Es indispensable establecer una estructura en cuanto a las actividades diarias de los chicos.
• Supervisar que se mantengan ciclos de sueño y alimentación adecuados.
• En el caso de tener trabajo en casa enviado por el colegio, permitir a los niños desarrollarlo y no intervenir, a menos que ellos lo necesiten.
• Si están teniendo clases online, considerar que este espacio es suyo, evitar interferir a menos que sea estrictamente necesario.
• Los niños pueden aprender mucho de lo que mamá y papá saben hacer, no solo de sus profesiones o conocimientos formales, sino también de lo que han aprendido en la vida: cocinar, algún oficio como la carpintería, bordar, tejer, arreglar aparatos domésticos, pintar una pared, etc.

Lo mejor que podemos hacer es darle prioridad al desarrollo del niño y salvaguardar su estabilidad emocional, y esto no es posible si no se observan estos aspectos en los padres. Cuidarnos como adultos es cuidar a nuestros hijos.

Liliana Contreras

Departamento Pedagógico