Para implementar la pedagogía Montessori, además de contar con un ambiente preparado y los materiales propuestos por la propia Dra. Montessori, el adulto representa el otro elemento decisivo.
“El primer paso para resolver integralmente el problema de la educación, no debe ser hecho hacia el niño, sino hacia el adulto educador; hace falta aclarar su conciencia, despojarlo de muchos preconceptos” (Montessori, María. El Niño en familia. Montessor-Pierson 2016, p.70.)
¿Qué es un Guía Montessori?
El guía Montessori es lo que equivaldría al maestro de la escuela tradicional, una figura que en Montessori tiene un papel fundamental: el responsable del ambiente preparado o aula. Su tarea principal es acompañar al niño, permitiendo el desarrollo natural y facilitando los aprendizajes. Para ello es imprescindible la observación, ya que a través de ella, el guía puede ofrecer al niño opciones de trabajo inteligente y, a medida que el niño se desarrolla, ir reduciendo la intervención.
En las escuelas Montessori es común que el guía cuente con el apoyo de un asistente, una figura clave para poder atender mejor las necesidades de los niños y niñas. En este otro post, hablamos sobre el papel del asistente Montessori en el ambiente preparado.
Funciones y aptitudes del Guía Montessori
“Entendemos como lección de la maestra su especial habilidad para presentarle el material a los niños y enseñarles su uso correcto… La parte esencial de la actividad se deja a la iniciativa del niño.” (Montessori, María. El Niño en familia. Montessor-Pierson, Amsterdam, 2016, p. 62)
Entre las funciones y aptitudes principales del guía destacan:
- Observar las necesidades e intereses de los niños y su desempeño con el material, para saber cuándo retirarse y cuándo intervenir.
- Entender el comportamiento de los niños, teniendo como referencia las características de la etapa de desarrollo en la que se encuentran.
- Mostrar el uso de los materiales y guiar a los niños en sus múltiples posibilidades.
¿Qué actitudes debe tener un guía?
La humildad es una de las actitudes que manifiesta el guía Montessori:
- Cuando reconoce que el niño es el protagonista del aprendizaje y por lo tanto, que el adulto no enseña, solo ofrece los medios.
- Cuando acepta sus propios errores y los de los demás como una oportunidad de aprendizaje.
- Cuando establece una relación horizontal con el niño, basada en el respeto.
- Siempre que está dispuesta a aprender, por el niño, con el niño y del niño.
El guía también se caracteriza por su capacidad de responsabilidad:
- Cuando identifica la individualidad de cada niño.
- Cuando mantiene el ambiente preparado y ofrece actividades en el momento oportuno y con la técnica adecuada.
- Cada vez que reflexiona sobre su propia labor y busca la forma de mejorarla.
- Cuando responde desde la calma, en lugar de reaccionar.
“La preparación exigida al maestro es el examen de sí mismo. Debe expulsar de su corazón la cólera y el orgullo” (Montessori, María. El Niño, el secreto de la infancia. Montessori-Pierson. Amsterdam, 2015, p. 171)
“El profesor que parte del principio de que es perfecto y no reconoce sus propios errores, no es un buen profesor. Se mire donde se mire, siempre encontramos al Señor Error! Si queremos dirigirnos hacia la perfección, conviene estar atentos a los errores, porque la perfección solo se conseguirá cuando los corrijamos” (Montessori, Maria. La mente absorbente del niño. Montessori-Pierson, Amsterdam, 2015, p. 227)
En resumen, la delicada labor de una guía Montessori implica el balance entre aspectos teóricos y prácticos y la dedicación al desarrollo personal.
¿Cómo ser Guía Montessori?
Para poder trabajar como guía Montessori y acompañar a niños y niñas en su desarrollo, es necesario conocer en profundidad los principios, la pedagogía y práctica Montessoriana.
En International Montessori Institute impartimos formaciones de Guía Montessori IMI para las etapas de 0-3, 3-6 y 6-12 años, todas con reconocimiento y validez internacional. En ellas ofrecemos todas las herramientas y facilidades para que nuestros alumnos y alumnas se conviertan en Guía Montessori y ayuden a mejorar la educación en sus aulas con un método eficaz:
- Guía Montessori Comunidad Infantil: etapa de 0 a 3 años (950 horas)
- Guía Montessori Casa de Niños: etapa de 3 a 6 años (1500 horas)
- Guía Montessori Taller I y Taller II: etapa de 6 a 12 años (1500 horas)
“La habilidad del adulto está guiada por la aplicación de las bases de nuestro método. Si se basa absolutamente en nuestro método, encontrará ayuda para lucha contra todas las pequeñas dificultades y podrá obtener grandes resultados” (Montessori, María. El Niño en familia. Montessor-Pierson, Amsterdam, 2016, p. 66)
Adela Vizcaíno
Departamento Pedagógico
Deja una respuesta